A ESTAS HORAS.

Olas de deseo estremecen cada centímetro de una piel que creía dormida, fría y vacía. Tibios besos despiertan sensaciones una vez olvidadas, y mis nervios se estremecen y mi pulso se acelera. Y es tan extraño como puedo sentir la sangre teñir cada poro. Y mis labios que quieren saciarse y mi lengua que quiere jugar, mis manos se entibiecen de solo pensar en el contacto que les espera. La ansiedad esta haciendo que esas mariposas en mi estomago tomen velocidad y ya se hace mas difícil escapar. No quiero escapar, brazos fuertes a mí alrededor, que hagan desparecer mi tan escaso pudor que hagan comparecer mi vergüenza ante unos ojos que me desnuden. Quiero sentir solo sabanas, piel, sudor…